Por: Miguel Ángel Martínez.
Tula.
Ante
la petición de Rafael Meneses Monroy, director del hospital regional de retirar
el ambulantaje existente frente al nosocomio, integrantes de la comisión de Comercio
buscan regular al comercio informal en lo referente a espacios, seguridad,
sanidad y salubridad.
Para llegar a un
acuerdo con los comerciantes (hasta ahora renuentes a dejar sus puntos de venta,
situados en las inmediaciones del sanatorio), integrantes de la comisión de
Comercio del ayuntamiento local, el pasado viernes sostuvieron una reunión con
los ambulantes.
En la que los munícipes
explicaron que de acuerdo a la Ley Orgánica municipal el ambulantaje está
prohibido, y que para hacerla valer los reglamentos vigentes se tendrían que
retirar de las calles, máxime que no cumplen con las normas de salubridad y
seguridad establecidas.
En este sentido, la
directora de Salud, Luz del Carmen Mejía Segura, que también estuvo presente en
la reunión, (junto con el titular de Reglamentos, Adolfo Álvarez Templos),
enumero una serie de violaciones en que incurren los ambulantes y por las
cuales se les prohibiría la venta.
Entre las cuales se
encuentran: la exposición de los alimentos preparados a la intemperie, es decir
sin refrigeración por largos periodos de tiempo, la carencia de tapas en los
recipientes, además de que no se usan redes para el cabello, ni guantes para la
preparación de los comestibles.
En su defensa los
informales dijeron que cuentan con una serie de documentos expedidos por la
Comisión para la Protección de Riesgos Sanitarios (Copriseh), dependiente de la
Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), quienes los mantienen bajo supervisión
constante.
Ante el inminente
retiro, solicitaron al gobierno municipal que los deje trabajar, a lo que los
munícipes contestaron tengan el afán de impedir que se ganen la vida
honestamente, pero que si quieren seguir vendiendo tienen que acatar ciertas
reglas.
Las medidas que deberán
adoptar obligatoriamente los ambulantes para que se les permita expender sus
productos son: elaborar los comestibles bajo mayores condiciones de higiene y
salubridad, rentar un local, o establecerse en una caseta de venta gestionada
ante particulares por la alcaldía.
Al término del citado
encuentro, comerciantes y regidores, visitaron las instalaciones adjuntas al
hospital regional para determinar los posibles puntos donde se instalarían las
casetas de venta que la administración local otorgaría en comodato a los
ambulantes.
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