martes, 13 de agosto de 2013 | By: Mike Mtz

Artesanos acusan prácticas corruptas de administradores de zona arqueológica Tula

EL COMPROMISO: USTED

Por: Miguel Ángel Martínez. 


Tula. Actos de corrupción, presencia de ambulantaje a pie de pirámide, engaños al turista, así como diversas irregularidades, cometidas y solapadas por personal directivo y -administrativo de la zona arqueológica Tula, denunciaron artesanos que laboran en el antiguo recinto ceremonial.

Los inconformes, quienes pidieron no ser identificados por miedo a represalias de parte de las autoridades de la zona, se quejaron de que tales anomalías las vienen denunciando desde hace por lo menos dos años, pero que en lugar de corregirse han empeorado.

“Hemos venido alertando a los responsables de la zona, desde que estaban Miguel Caraveo y Arturo Rubí, delegado estatal del INAH en Hidalgo y antiguo administrador de la zona; pero vemos que lejos de mejorar las cosas han empeorado con los nuevos directivos”.

Lo anterior, en referencia a las nuevas gestiones de Rodolfo Palma y Mauricio Antillón, quienes desde el año pasado ocupan los respectivos cargos; explicaron que al llegar a los cargos hubo ligeros cambios, “pero después se les olvidó y las cosas han empeorado”.

Y abundaron respecto al caso: antes, sólo se vendían figuras artesanales a pie de pirámide, pero aproximadamente tres meses atrás, se empezó a vender refrescos, comida, tunas (en temporada), y hasta bebidas embriagantes, hoy no hay un orden en la zona arqueológica.

Por otra parte denunciaron la presencia de pseudo artesanos, que ofrecen a los paseantes piezas arqueológicas de propia manufactura como si fuesen originales, “les piden hasta 50 mil pesos, por una pieza que vale 300”.

En este sentido, lamentaron que los turistas no tienen ante quién quejarse cuando descubren algún fraude, ya que todas las autoridades administrativas están coludidas en favor de los morraleros, “incluso los guardias de seguridad privada que hay en la zona los protegen”.

Por último, reiteraron su deseo de que durante las gestiones de Rodolfo Palma y Mauricio Antillón, se empiece a hacer algo por retomar el control de la zona arqueológica, ya que durante las administraciones anteriores sólo hubo promesas y no se hizo nada.


“Miguel Caraveo se comprometió a tomar acciones de regulación y sanción contra quienes fueran sorprendidos incurriendo en una falta, hoy ya se fue y no resolvió nada, las mismas prácticas denunciadas prevalecen y en la actualidad hasta han empeorado”.


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